27 de Septiembre, 2023
Al momento de nacer, los 8 huesos del cráneo y los 14 de la cara no están unidos firmemente,1 esto permite que la cabeza, relativamente grande del bebé, se desplace por el estrecho canal de parto. La cabeza de un recién nacido, que tiene una forma irregular justo después del nacimiento, suele redondearse con el tiempo.2
El área en donde se unen los huesos en el cráneo del bebé se llama sutura; el espacio donde 2 suturas se unen forma un “punto blando” cubierto de membranas, denominado fontanela o coloquialmente llamado “mollera”. Las fontanelas permiten el crecimiento del cerebro y el cráneo durante el primer año de vida.1
Con el tiempo, las suturas gradualmente obtienen minerales y se endurecen, uniendo con firmeza los huesos del cráneo. Este proceso se denomina osificación.1
¿Cómo y cuándo deben cerrarse las fontanelas en un bebé?
Al igual que las suturas, las fontanelas se endurecen con el tiempo y se convierten en áreas óseas sólidas y cerradas.1
- La fontanela ubicada en la parte de atrás de la cabeza (fontanela posterior) se cierra usualmente en los primeros 2 meses de edad.1
- La fontanela ubicada en la parte de arriba de la cabeza (fontanela anterior) se cierra generalmente entre los 7 y 19 meses de edad.1
¿Cuáles son algunos datos de alarma?
Una fontanela hundida puede ser una emergencia médica. Las razones por las que un bebé puede sufrir este padecimiento incluyen deshidratación (insuficiencia de líquido en el cuerpo) o desnutrición.1
Por otro lado, una fontanela abultada se presenta cuando el líquido se acumula en la cavidad del cráneo o cuando la presión aumenta en el cerebro. Una de las causas más comunes es hidrocefalia (aumento de líquido en el cráneo).1
Bajo cualquiera de las dos circunstancias, ya sea hundimiento o abultamiento, es inminente que un médico revise al bebé de inmediato.1
Cambios que pueden ocurrir en el cráneo después del nacimiento
La forma de la cabeza del bebé cambia después del nacimiento debido a la presión que se ejerce sobre esta cuando se le acuesta en la misma posición frecuentemente. Pasar demasiado tiempo acostado en una sola posición puede hacer que la cabeza del bebé desarrolle una forma irregular, la cual puede durar mucho más tiempo que la asimetría relacionada con el nacimiento. Esto se conoce como moldeado postural.2
Este moldeado postural es considerado un “problema” meramente estético, ya que las áreas planas relacionadas con la presión en la cabeza no producen daño cerebral ni interfieren en el desarrollo del bebé.2
Sin embargo, estos son algunos ejemplos de acciones que puedes tomar para evitar el moldeado postural:
- Cambia la posición de tu bebé. Sigue colocándolo boca arriba para dormir, pero alterna la dirección hacia la que mira su cabeza en la cuna. Acomoda a tu bebé si se mueve mientras duerme y se pone en la posición inicial anterior.2
- Sostén a tu bebé. Sostenlo en posición vertical cuando esté despierto para ayudar a aliviar la presión sobre la cabeza provocada por las sillas y los portabebés. También podrías alternar los brazos para sostener a tu bebé en cada toma.2
- Prueba con un tiempo boca abajo. Se refiere al acto de colocar a tu bebé boca abajo con frecuencia para jugar mientras está despierto, siempre y cuando puedas vigilarlo y auxiliarlo desde cerca. Asegúrate de que tu bebé esté sobre una superficie firme durante el tiempo boca abajo.2
Consulta a tu médico.
GCMA: PP-UNP-MEX-0934