26 de Junio, 2023
Actualmente, la presencia de flujo vaginal es el motivo por el cual las mujeres en edad reproductiva consultan con mayor frecuencia la atención primaria. La mayoría de las mujeres ha tenido una infección vaginal por lo menos una vez en su vida, tanto las que no están activas sexualmente, como aquellas que sí lo están, sobre todo si en estas últimas se une la mala práctica higiénica sanitaria y sexual.1
¿Qué es el flujo vaginal?
Es un líquido claro, blanco o blanquecino proveniente de la región vaginal. El útero, el cuello del útero y la vagina producen este fluido, el cual está compuesto por células y bacterias que ayudan a limpiar y lubricar la vagina con el objetivo de combatir infecciones. El flujo vaginal es un proceso natural y normal, sin embargo, los cambios en su color, textura, olor o cantidad habitual pueden indicar la existencia de una alteración.2
Flujo vaginal normal. Debe ser transparente o blanco. La cantidad, color y consistencia del flujo vaginal puede variar de blanquecino y pegajoso a transparente y líquido; no debe oler mal y su espesor puede variar según la etapa del ciclo menstrual.2
Flujo vaginal anormal. Se debe diferenciar entre una descarga vaginal –o secreción vaginal normal– debido a los cambios hormonales pre y post ovulatorios, y la descarga anormal. La descarga o flujo anormal puede ser una secreción lechosa o blanquecina, amarillenta, con un olor fétido similar a olor a pescado, acompañada de comezón o ardor en genitales.3
Los organismos patógenos que causan con más frecuencia este tipo de síntomas son las infecciones por hongos (Cándida sp –candidiasis vaginal–), bacterias (vaginosis) y protozoarios (trichomonas vaginalis –tricomoniasis vaginal–).3
Candidiasis vaginal. Suele existir inflamación vulvar y vaginal acompañada de:3
- Secreción que se adhiere, blanquecina, con grumos (parecida al queso Cottage)
- No fétida
- Enrojecimiento importante
- Pruriginosa (comezón)
- Molestias al orinar
A pesar de que las infecciones vaginales por hongos no son consideradas una infección de transmisión sexual (ITS), se reconoce el papel que tiene el contacto sexual en su transmisión. Entre los factores de riesgo asociados para adquirirla se encuentran el uso de anticonceptivos orales, empleo de duchas vaginales y el número de parejas sexuales.1
Vaginosis causada por bacterias. Suele presentarse con:3
- Flujo vaginal blanco o grisáceo
- Mal olor (olor a pescado)
- Ausencia de dolor, comezón o irritación
Se asocia al empleo del dispositivo intrauterino como método anticonceptivo, a la presencia de varias parejas sexuales y al empleo de duchas vaginales. El hecho de que las mujeres que no han tenido relaciones sexuales raramente son afectadas, habla a favor de que sea considerada como una ITS.1
Tricomoniasis vaginal. Se caracteriza por la presencia de:3
- Flujo anormal o amarillento abundante, espumoso
- Mal olor
- Dolor al orinar
- Dolor pélvico
- Inflamación y enrojecimiento en vulva y vagina
Es la ITS no viral que con más frecuencia causa vaginitis en mujeres sexualmente activas y se asocia con tener un mayor número de parejas sexuales o no usar protección durante la relación sexual.1
Causas no infecciosas. Las modificaciones en el flujo vaginal no siempre están causadas por una infección. Los cambios en el equilibrio normal de bacterias sanas en la vagina y la excitación sexual también pueden provocar flujo vaginal.2
Puede producirse después de la menopausia, cuando disminuyen los estrógenos. Los niveles más bajos de estrógeno hacen que las paredes de la vagina se sequen y se vuelvan más finas de lo normal.2
Flujo vaginal durante el embarazo. Es normal que aumente la cantidad de flujo vaginal durante el embarazo para evitar que las infecciones suban hasta el útero. El aumento de los niveles de progesterona también puede hacer que se produzca más flujo.2
Sin embargo, es importante saber diferenciarlo ya que la infección vaginal en el embarazo es una de las complicaciones médicas más frecuentes en esta etapa y se asocia a una mayor incidencia de ruptura prematura de membranas.3
Consulte a su médico.
GCMA: PP-UNP-MEX-0766