03 de Febrero, 2023
La enfermedad de Parkinson (EP) es un desorden del movimiento crónico y progresivo que implica el funcionamiento defectuoso y la muerte de células nerviosas vitales en el cerebro, llamadas neuronas.1
Los signos principales de la EP son aquinesia (ausencia sustancial de movimientos), temblor en estado de reposo, rigidez, aumento de la tensión muscular y resistencia al movimiento e inestabilidad de la postura por pérdida del equilibrio.2 La incidencia de la EP aumenta con la edad, pero se estima que un 4% de las personas reciben el diagnóstico antes de los 50 años.1
En la enfermedad, algunas neuronas del cerebro se descomponen o mueren progresivamente. Muchas manifestaciones obedecen a una pérdida de las neuronas que producen dopamina, un tipo de neurotransmisor del cerebro. Cuando los niveles de dopamina disminuyen, esto causa una actividad cerebral anormal, lo que conduce a un movimiento deficiente y otros síntomas similares.3
El primer caso diagnosticado de EP fue en 1817. Desde entonces y hasta la fecha, miles de nuevos casos se reportan a diario. Se estima que para 2030 la población afectada por la enfermedad será el doble de la diagnosticada en 2016.2
Posibles causas
A pesar de décadas de estudio intensivo, las causas de la enfermedad de Parkinson siguen sin conocerse. Muchos expertos consideran que es ocasionada por una combinación de factores genéticos y ambientales, que pueden variar en cada persona.1 Sin embargo, en la mayoría de los casos reportados (95%) las causas son de tipo desconocido.2
Estudios epidemiológicos han encontrado una alta correlación entre la exposición a agentes pesticidas, metales pesados y la aparición de EP.2 No obstante, aunque se desconoce la causa exacta, varios factores parecen influir, incluyendo:3
- Genes
- Desencadenantes ambientales
- Presencia de cuerpos de Lewy (masas de sustancias específicas dentro de las neuronas cerebrales)
¿Cuáles son los factores de riesgo de la enfermedad de Parkinson?
Entre los factores de riesgo se encuentran:1
- Edad. Originalmente comienza en etapas medias o avanzadas de la vida, y los riesgos aumentan con la edad.
- Predisposición genética. Tener un pariente cercano que padece Parkinson aumenta las probabilidades de que se desarrolle la enfermedad.
- Sexo. Los hombres son más propensos a desarrollarla.
- Exposición a toxinas. La exposición constante a herbicidas y pesticidas puede aumentar ligeramente el riesgo.
Métodos de prevención
Muchos síntomas de la EP se pueden tratar, y los investigadores están realizando avances para comprender la enfermedad, sus causas y cuál es la mejor manera de tratarla.1
Sin embargo, debido a que se desconoce el desencadenante exacto de la enfermedad, las maneras probadas para prevenirla también son un misterio. En algunas investigaciones se ha demostrado que el ejercicio aeróbico regular podría reducir el riesgo de presentarla. En otras, se ha observado que las personas que consumen cafeína y té verde contraen la EP con menos frecuencia.3
En todas las etapas de la enfermedad, hay terapias efectivas disponibles para aliviar sus manifestaciones y permitir tener una mejor calidad de vida.1
Consulte a su médico
GCMA: PP-UNP-MEX-1382