10 de Julio, 2024
Dos padecimientos comunes y similares
Al final de un resfriado podemos sentirnos listos para volver a nuestras actividades habituales. Sin embargo, las infecciones de las vías respiratorias superiores, tal como el resfriado, dejan las vías respiratorias inferiores más vulnerables a los virus y bacterias, y es ahí cuando la bronquitis o la neumonía pueden atacar.1
Aunque ambas enfermedades comparten muchas similitudes, en realidad son diferentes. Para comprender mejor cada una de ellas, veamos más sobre sus causas, manifestaciones y cómo tratarlas.1
Bronquitis
Ocurre cuando los conductos que transportan aire hacia los pulmones se inflaman, con frecuencia después de una infección viral, como el resfriado. A medida que estas vías respiratorias (llamadas bronquiolos) se inflaman, comienzan a llenarse de moco pegajoso y desagradable.1
La bronquitis tiene distintas formas que varían según las causas; estas pueden ser:2
- viral (la cual provoca la mayoría de los casos);
- bacteriana;
- fúngica;
- por exposición a irritantes como humo de tabaco, polvo, humos, vapores y contaminación del aire.
Algunos síntomas son tos severa, moco claro o amarillo y dificultad para respirar. Dado que la mayoría de los casos de bronquitis aguda son virales, los antibióticos no suelen ser un tratamiento eficaz. Lo que puede ayudar a combatir la infección es el reposo, beber abundantes líquidos y tomar medicamentos especiales para la tos.2
Neumonía
Es un tipo diferente de infección que no afecta las vías respiratorias directamente, sino que inflama los sacos diminutos (alveolos) en una parte de los pulmones. La inflamación y la mucosidad resultante dificultan el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono entre los pulmones y el torrente sanguíneo.1
Una amplia variedad de bacterias, virus y hongos puede causar neumonía.1 Algunos de los síntomas son muy similares a los de la bronquitis. Estos incluyen:2
- tos severa con moco;
- fiebre;
- respiración limitada;
- dolor de garganta.
El mejor tratamiento —que pueden ser antibióticos o antifúngicos— depende del tipo de neumonía que se tenga, pero no existe un tratamiento específico para las formas virales.2
Cabe señalar que las vacunas pueden proteger desde los más jóvenes hasta las personas de la tercera edad de algunos tipos de neumonía bacteriana.1 Por ejemplo, la vacuna puede ayudar a prevenir la neumonía neumocócica. Este tipo es frecuente entre las personas mayores y aquellas con sistemas inmunitarios debilitados.2
Diferencias entre bronquitis y neumonía
La bronquitis puede progresar a neumonía en algunos casos. Aunque estas dos enfermedades afectan distintas partes de los pulmones, los síntomas de neumonía suelen ser más serios y, en algunos casos, peligrosos para la vida.1
Algunos de los síntomas que pueden ayudar a distinguir la neumonía de la bronquitis incluyen:2
- confusión en algunas personas, especialmente en personas mayores;
- nausea y vómito, particularmente en bebés y niños;
- escalofríos y dolor muscular.
Solo un médico puede diagnosticar de manera concluyente la causa de las dificultades respiratorias. Si estos problemas respiratorios empeoran rápidamente, se recomienda acudir a la sala de emergencias o buscar atención médica de inmediato.2
Consulte a su médico.
GCMA: PP-UNP-MEX-1483
